Tantos años en este pueblo, en el campo, donde las viviendas están muy separadas
unas de otras que ya nada me sorprende. Conozco a todos. Yo represento para ellos
protección, fuerza, la ley que se puede manejar según necesidad. Acá somos socios de
la vida sin contrato escrito pero firmemente unidos por la soledad, traiciones,
intereses, dinero que me llega en pago de algo que no siempre sé cómo lo gané y
menos si lo merezco Dice el saber popular que el que lo da si sabe.
Escuchen esto. Hoy tengo que resolver un problema que aparentemente está listo,
cocinado, en bandeja. A la cárcel no va a ir nadie. Imagínense. Un tipo llega a su
casa sin aviso y lo bajan de un tiro de escopeta en la cara. Testigos oculares del hecho
no hay. La esposa del asesinado señala con gritos, dedo acusador y arma a un pobre
diablo, el opa que vive en el galpón de la casa. Inimputable, que fascinado por los
fuegos artificiales que ha visto, responde a todo lo que le prometa nuevas luces
mágicas.
El muerto, flor de boludo, que sabía que no debía regresar en horas no habituales, ya
no habla. Mis asistentes estuvieron en el lugar bastante más tarde y semidormidos, claro era de madrugada..Ellos no entienden nada ni les interesa entender.
Y yo, después de escapar semidesnudo, terminé de vestirme y me reuní con ellos.
Nunca me imaginé ver a mi amante tan desencajada, llorosa, inconsolable. Me fue
difícil aguantar la risa. No era la misma que una hora antes disfrutaba conmigo en la
cama pensando que teníamos todo el tiempo para nosotros.
3 comentarios:
ja ja ja, muy bueno Norma!
Hola Norma.
Un personaje muy bien logrado,casi autentico.
Reescribir no es tan desagradable y aqui manifestas tu creatividad, sin ninguna duda.
Cariños Syl
jjjljljlkjl
Publicar un comentario